La Luna
Mucha gente en este mundo tiene un comportamiento
extraño,
Y por el cual se busca en vano la causa y el secreto;
Sin que se sepa por qué, sus almas amables
En un instante de coléra absoluta se declara.
Uno defiende una cosa, y después la permite;
Otro es inglés en la mañana, y en la tarde se vuelve
tártaro.
Uno con el alma calmada se convierte en embrollador, distraido,
El otro, gran orador, se queda mudo en la barra.
Uno cambia de actitud tan pronto como desayuna;
Y el otro para hacerlo espera hasta después de la cena;
Avaro, este último prodiga su fortuna.
Uno, progresista a fondo simpatiza con los conservadores;
¿De donde vienen los reflujos y flujos de estos
comportamientos?
Como los del mar, ¿no vendrán de la Luna?